Analicemos si el desayuno es un hábito saludable o no lo es tanto. Examinemos lo que indica la ciencia y cuál es el hábito que puede ser efectivo para usted.

Un desayuno completo y nutritivo.
He repetido mil veces que “El desayuno es la comida más importante del día.” Y de hecho para mí es así. Mis mañanas comienzan muy temprano con un buen desayuno que comparto la mayoría de los días con mi familia. La combinación que hacemos es la ideal para nosotros según nuestros gustos y tolerancias alimentarias, y considero, según mi experiencia personal, que desayunar es un hábito saludable fundamental para comenzar el día temprano y mantener mis niveles de energía y mi apetito programado para sentir hambre nuevamente al medio día.

Es un hecho generalmente aceptado que el desayuno es un hábito saludable. La clave está en encontrar una combinación de alimentos nutritivos y equilibrados que se ajuste a las necesidades particulares de cada persona. Por ejemplo, algunas personas son intolerantes a ciertos alimentos o tienen preferencias alimentarias específicas, por lo que necesitarán una combinación de alimentos distinta a la de otras personas. Es por esto, se recomienda investigar y asesorarte para encontrar el desayuno ideal que se adapte a sus necesidades.
Elegir la combinación de los alimentos según las necesidades individuales
Ahora bien, parece que estudios recientes cuestionan si realizar el desayuno como la primera comida del día, es un hábito saludable. Esto se debe a que las siguientes afirmaciones no han podido ser confirmadas científicamente:
1. Los que desayunan tienden a tener hábitos más saludables.
2. Los que no desayunan tienen menor probabilidad a tener sobrepeso y menor riesgo a enfermedades crónicas
Veamos lo que dice la ciencia
Los investigadores señalan que los resultados obtenidos de estos hallazgos proceden de estudios observacionales, los cuales muestran que las personas que desayunan tienen más probabilidades de ser más saludables, pero no pueden establecer una causalidad directa entre el desayuno y la salud. Es posible que estas personas tengan otros hábitos de vida saludables que pudieran explicar esto.
Un ejemplo de esto es que aquellos que desayunan probablemente siguen una dieta saludable debido a que consumen alimentos integrales y frutas, que son ricos en fibra, vitaminas y minerales
Así como también, las personas que omiten el desayuno, tienden a fumar más, beber alcohol y hacer menos ejercicio.
Por lo tanto, es muy probable que estas sean las razones por lo que las personas que tienen el desayuno como un hábito sean en promedio más saludable y no por el desayuno en sí.
Al parecer, no hay diferencia en el total de calorías que el cuerpo utiliza al día, independientemente de si se desayuna o no. No obstante, lo que importa para el metabolismo es la cantidad total de alimentos ingeridos a lo largo del día. No importa en qué momento del día o con qué frecuencia se realicen las comidas.
Es decir, la cantidad total de alimentos consumidos a lo largo del día es más importante que la hora o la frecuencia con la que comemos. Para mantener una dieta saludable, es fundamental que consumas alimentos nutritivos y equilibrados a lo largo del día, independientemente de si desayunas o no.
Otra afirmación indica que saltarse el desayuno puede hacer que tengas más hambre a la hora de comer, lo que te hará ingerir más cantidad si hubieras desayunado.
Los estudios demuestran que no tiene importancia si las personas comen o se saltan el desayuno. El desayuno te hace comer más en el almuerzo, pero no en cantidad suficiente para compensar el desayuno que te saltaste.
En lo que respecta a esto, la cantidad total de alimentos que consume durante el día es mucho más importante que la hora o la frecuencia con la que come. Para mantener una dieta saludable, es esencial ingerir alimentos nutritivos y equilibrados durante el día, independientemente de si se desayuna o no. Asimismo, es fundamental asegurarse de que se está consumiendo la cantidad adecuada de calorías para cada nivel de actividad.
Por otro lado, omitir el desayuno pudiera tener algunos beneficios para la salud. Esto es una parte común de muchos métodos de ayuno intermitente. Está el 16/8, que consiste en un ayuno nocturno de 16 horas seguido de una ventana para comer de 8 horas. Es decir, comes en el almuerzo y la cena y se omite el desayuno.
Estudios han demostrado que el ayuno intermitente reduce efectivamente la ingesta de calorías, aumenta la pérdida de peso y mejora la salud metabólica.

El hábito que puede ser efectivo para cada quien
No obstante, es importante señalar que saltarse el desayuno no es adecuado para todo el mundo. Algunas personas pueden experimentar efectos beneficiosos, mientras que otras pueden padecer dolores de cabeza, niveles bajos de glucosa en sangre, desmayos y falta de atención. Si este último es su caso, tenga en cuenta el desayuno como una de sus comidas principales. Planificar su desayuno cuidadosamente puede ofrecerle una oportunidad para consumir la variedad de nutrientes indispensables para el buen funcionamiento de su cuerpo a lo largo del día.
Si no desayuna, debe tomar precauciones para evitar que se sienta cansado o débil durante el día. Puede estar tranquilo de que obtendrá todos los nutrientes necesarios a través de una dieta saludable y equilibrada durante el resto del día, y con la suficiente actividad física.
Consideraciones finales
Probablemente, no importe si comes o te saltas el desayuno, siempre y cuando comas lo adecuado nutricionalmente durante el resto del día.
Finalmente, lo cierto es que muchos estudios han demostrado que el desayuno no es un requisito para perder peso y que comer o no desayunar no afectará automáticamente su metabolismo.
Es importante destacar que su decisión de comer o no desayunar debe basarse en tus preferencias personales y en tus necesidades nutricionales. Si siente hambre por la mañana y le gusta comer desayunos saludables, entonces no hay nada de malo en hacerlo. Por otro lado, si no siente hambre por la mañana, entonces es mejor no desayunar.
La asesoría nutricional te ayudará a encontrar el hábito de alimentación que mejor apoyo y bienestar le brinde a tu salud.